Llegados a España, Red Bull no quiere ni oír hablar de renuncia a la lucha por un título que ha sido suyo en los últimos cuatro años. Christian Horner deja claro en declaraciones a ‘La Gazzetta dello Sport’ que su equipo sigue trabajando y presionando a Renault para mejorar sus unidades motoras. Aunque la ventaja de Mercedes, tanto en el Campeonato como a nivel técnico, parece insalvable, los austriacos confían en que su RB10 -que sigue los conceptos de 2013- pueda mostrar su verdadero rendimiento.

"Todavía quedan 15 carreras, es una maratón no un sprint. Esperemos que en España comencemos a reducir significativamente las diferencia con Mercedes", declara el jefe de equipo de Red Bull. "Sé que nuestro coche es fantástico. Cuando reduzcamos la desventaja del motor, estaremos arriba de nuevo. Creo que de todos los suministradores, Mercedes ha hecho el mejor trabajo, seguido de Ferrari y por último, Renault. Pero veremos cómo acaba todo".

La posibilidad de un cambio de motor, de momento, no parece ser factible, pero Horner asegura que "La presión sigue puesta, obviamente, sobre Renault para que desarrolle un producto competitivo pero ellos tienen a la gente adecuada y confiemos en que así será".