El jefe de equipo de Red Bull, Christian Horner, está prácticamente convencido de que tendrán que asumir, por lo menos, una penalización más en lo que resta de temporada. En Italia, el equipo austriaco optó por un cambio estratégico para estrenar nuevos componentes y así asegurarse de que en Singapur no aparecerán problemas eventuales.

Sin embargo, desde Milton Keynes no creen que puedan llegar a Abu Dabi sin cambiar alguno de los componentes de la unidad de potencia, lo cual acarreará una inevitable sanción de posiciones en parrilla.

"Estamos seguros de que volveremos a incurrir una penalización, por lo que espero que tengamos la opción estratégica de tomar esa sanción, pero no es probable que lleguemos a final de año sin asumir una nueva sanción", asegura Horner a Motorsport.com.

"No es probable que lleguemos a final de año sin asumir una nueva sanción"

Además, Horner reconoce que Renault parece haberse puesto las pilas tras el abandono de Max Verstappen en Bélgica. El motorista francés ha respondido con la suministración de más piezas para los equipos cliente, así como la asignación de mayor personal para acompañar a Red Bull en Singapur.

"Han respondido (Renault), lo cual es alentador. Pero el problema es que en Monza eran nuevos motores, así que si hubiéramos tenido un problema con el primer motor en su ciclo habría sido bastante catastrófico. Lo alentador es que parecen estar tomándoselo en serio, no están poniendo sobre la arena y esperemos que siga una tendencia al alza entre ahora y final de año", concluye.