Max Verstappen finalizó el Gran Premio de China en tercera posición protagonizando una gran remontada que tuvo su origen en la primera vuelta. Aprovechando las complicadas condiciones de la pista, el piloto neerlandés tuvo una arrancada correcta desde el 16º lugar y subió tres puestos al llegar a la primera curva.

A partir de ahí, Verstappen continuó con su espectacular hazaña realizando adelantamientos tanto en el interior como en el exterior de las curvas e incluso se permitió algún que otro riesgo. El piloto de Red Bull pasó por la línea de meta en la séptima posición, por lo que escaló un total de nueve posiciones en apenas una vuelta. Esta gran actuación fue una de las razones por las que los aficionados decidieron votarle como piloto del día.

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