La prensa alemana asegura que Ross Brawn, actual jefe de equipo de Mercedes, ya tendría las maletas hechas para abandonar el equipo con sede en Brackley. De hecho, el diario Sport Bild apunta que el británico dejará las flechas plateadas, como muy tarde, a finales de esta semana.

Retirarse no está en la mente de uno de los mejores ingenieros de la Fórmula 1, por lo que cada vez son más intensos los rumores que especulan con el regreso de Brawn a la escudería con la que tuvo más éxito, Ferrari. En declaraciones a la televisión Sky, el británico afirmaba: “Avisaremos a todo el mundo a tiempo, pero será un año emocionante. Veremos qué pasa”, comentaba aunque sin dar demasiados detalles sobre su posible destino en 2014.

Por ahora, todo son rumores pero el hecho es que el jefe de equipo de Il Cavallino Rampante, Stefano Domenicali, y Brawn hablaron durante el pasado Gran Premio de Brasil. No obstante, el de Mercedes sonrió cuando le preguntaron si Interlagos era su última carrera de F1: “No tengo respuesta”, declaró el todavía miembro de la marca alemana.

El equipo al completo, especialmente Niki Lauda, ha intentado convencer a Brawn para que se quede, pero parece que el británico ya habría tomado la decisión de marcharse. Con esto, Paddy Lowe, actual director ejecutivo de la área técnica de la marca de la estrella, se convertiría en el nuevo jefe de equipo.

Brawn fue partícipe de los dos Mundiales logrados por Michael Schumacher en Benetton en 1994 y 1995. Posteriormente recaló en el equipo Ferrari, donde consiguió seis títulos de constructores consecutivos. Más adelante estuvo en el equipo Honda y fue en 2009 cuando, tras hacerse con todos sus derechos, ganó otro Mundial de pilotos y de constructores pero esta vez con Brawn GP. Al concluir la campaña 2009, el británico estuvo al frente de las operaciones para el regreso de Mercedes a la Fórmula 1, escudería que suma cuatro victorias desde 2010.