Fin de semana para olvidar para Charles Leclerc. El piloto monegasco ha tenido que abandonar en su carrera de casa por daños en su Ferrari. El piloto de 21 años mostró sus intenciones con una agresiva salida en la que se quitó a tres pilotos de un plumazo.

Desde ahí, Leclerc adelantó primero a Lando Norris en la complicada curva de Lowes con una magnífica maniobra. El siguiente rival sería Romain Grosjean. Previsiblemente, el francés no se lo pondría tan fácil al piloto de Ferrari. El de Haas aguantó las primeras embestidas con apuros, hasta que Leclerc le lanzó el coche en la Rascasse; una arriesgada maniobra que apunto estuvo de terminar en toque, aunque ambos pudieron continuar sin problemas.

No sucedió lo mismo con Hulkenberg. El piloto de Ferrari quiso repetir la misma maniobra con el alemán, aunque, en este caso, toco el muro con su neumático trasero derecho. Pinchazo en el Ferrari. La goma comenzó a deshilacharse y desintegrarse, con tal mala fortuna que algunos trozos destrozaron parte del fondo plano.

Leclerc entraba a boxes con una vuelta perdida. La carrera estaba prácticamente terminada para el piloto monegasco, aunque trato de aguardar a la lluvia o algún milagro durante varias vueltas. Finalmente, los daños eran tales que Ferrari optó por retirar el monoplaza, en una fin de semana aciago para el compañero de Sebastian Vettel.

“Es una pena no haber podido terminar la carrera", expica. "Los daños en el suelo me han obligado a retirarme. Como equipo tendremos que aprender; caer en la Q1 es muy decepcionante. Esperábamos una carrera muy distinta y aprenderemos de ello”, concluye.