El Gran Premio de China es una cita particular en relación a los neumáticos. El evento que alberga el circuito de Shanghái es el primero de la temporada en el que hay un salto en los compuestos, pasando del blando directamente al ultrablando. Este escalón ha causado estragos entre los pilotos y los equipos, pues a lo largo del fin de semana se ha registrado un alto desgaste del neumático identificado con el color morado.
Debido a la degradación y a las temperaturas más cálidas que se esperan, la goma ultrablanda podría tener una aparición muy breve en la carrera. Mercedes y Ferrari son los únicos equipos del top 10 tomaron la decisión estratégica de clasificar en Q2 con el neumático blando, por lo que arrancarán con este compuesto y podrían realizar solo una parada el domingo. En este sentido, los pilotos que salgan con los ultrablandos probablemente se verán obligados a pasar por boxes en dos ocasiones, llevando a cabo el primer cambio en las vueltas iniciales.
Los pilotos que cuentan con dos juegos de ultrablandos por estrenar podrían arriesgarse a intentar realizar dos paradas, siendo este el caso de los pilotos de Williams, Pierre Gasly y Kevin Magnussen. Aun así, todo parece indicar que la estrategia ideal sería hacer solo una parada teniendo en cuenta la corta duración de la goma más blanda disponible este fin de semana.
Llama la atención el hecho de que toda la parrilla cuenta con un juego nuevo de medios, listo para utilizar en caso de que la estrategia sea realizar una sola parada. Este neumático tuvo un buen funcionamiento en Bahréin y hubo pilotos que consiguieron terminar la carrera con los medios haciendo un ‘pit stop’. Además, también se ha utilizado esta goma durante algunas simulaciones de carrera, signo de que podría hacer su aparición.
