La pretemporada dejó muchas incógnitas con respecto al rendimiento de Mercedes. El equipo de Brackley estuvo más discreto de lo habitual, mientras que Ferrari se marchó de los test con el mejor tiempo de las pruebas. El comportamiento del W10 era más errático de que costumbre y muchos situaban a Mercedes claramente por detrás de la Scuderia llegando a Australia.
En Melbourne, la situación fue totalmente distinta. Mercedes lideró todo el fin de semana, mientras que Ferrari sufrió diversos problemas que dejaron a la estructura de Maranello fuera del podio, siendo superada por el Red Bull de Max Verstappen en carrera. A pesar de esta nueva muestra de dominio, en Mercedes todavía son cautos a la hora de hablar de su rendimiento.
“Después del test de Barcelona, pensamos en que somos los perseguidores. Independientemente de lo que diga el resultado de Melbourne, nuestra mentalidad no ha cambiado desde entonces. Una carrera no determina el orden competitivo del resto de la temporada. Necesitamos extraer cada pizca de rendimiento de nuestro coche y seguir trabajando para mejorar a lo largo del fin de semana”, declaró Toto Wolff.
“Conseguir el máximo de 44 puntos de una carrera en la primera cita del año es un resultado fantástico. No podíamos pedir un mejor comienzo de temporada, pero la lucha acaba de comenzar. Ferrari lo intentará todo para volver a pelear y en Melbourne se vio que Red Bull también tendrá algo que decir en la batalla. Vimos el potencial del Ferrari en Barcelona, así que esperamos que vuelvan en Bahréin”, añadió.
Bahréin supone un desafío completamente distinto al de Australia debido a las condiciones extraordinarias en las que se desarrolla el fin de semana. Aunque la mayoría de los entrenamientos tienen lugar durante el día, la clasificación y la carrera se disputan por la noche. Esto hace que los equipos tengan que trabajar con diferentes configuraciones en los monoplazas.
“Veremos una carrera muy diferente en Bahréin, pues el fin de semana presenta desafíos únicos, especialmente hablando del cambio de las condiciones de sesión en sesión. Estos cambios de temperatura hacen que sea muy complicado optimizar el ‘set up’ del coche y encontrar la configuración adecuada para las sesiones que cuentan de verdad”, comentó Wolff.
