El presidente de Daimler y Mercedes-Benz, Dieter Zetsche, ha decidido intervenir en la guerra entre Nico Rosberg y Lewis Hamilton, que estalló tras el Gran Premio de Bélgica cuando el piloto alemán le pinchó una rueda al británico y le dejó sin opciones de puntuar.

Zetsche siempre ha sido partidario de dejar a un lado las órdenes de equipo e intentó convencer a los miembros del equipo Mercedes a buscar una solución para mantener la política del equipo y dejar correr libremente a los dos pilotos.

El presidente honorífico del equipo, Niki Lauda, aseguró que volverán a tratar el tema en una reunión que se celebrará hoy en Brackley. "Naturalmente, tenemos que informarle. Necesitamos una aclaración. El proyecto de F1 construye la credibilidad de la marca. No estaré en la reunión, pero Toto, Paddy y los dos pilotos sí que estarán", comentó el austríaco.

El equipo hizo algo insólito en la historia de la Fórmula 1 esta semana, cuando preguntaron a sus seguidores en Twitter si debían mantener la lucha entre los dos pilotos o aplicar órdenes de equipo. "Es la oportunidad para que habléis", publicaron en su cuenta oficial. "¿Perjudicaríais a un piloto para la carrera y no priorizar los puntos en la clasificación de constructores?", añadieron.

La respuesta de los fans fue previsible y abrumadora, ya que el 92% de los votos decidieron seguir con las carreras libres y dejar a los pilotos con su lucha, mientras que el 8% de los aficionados prefieren que haya órdenes de equipo a partir de la próxima carrera.

"Nada cambia", dijo Lauda. "Es importante para evitar riesgos innecesarios. No quiero prejuzgar la reunión de hoy. Veremos que decisiones se toman", concluyó.