La tercera temporada del campeonato FIA Fórmula E llegó a su fin este fin de semana con la disputa de un doble ePrix en un trazado urbano situado en Montreal, Canadá y donde Lucas di Grassi se ha coronado como campeón, siendo el tercer ganador distinto en las tres temporadas de vida del certamen.
La victoria del brasileño ha llegado contra pronóstico, pues no hay que olvidar que de las ocho primeras carreras de este campeonato programado a doce carreras, Sébastien Buemi ganó seis, dejando el campeonato prácticamente finiquitado a mitad de año. Sin embargo, dos descalificaciones unido a la pérdida de la doble cita de Nueva York por coincidencias en el calendario con el mundial de resistencia y unido a un fin de semana realmente desastroso en Canadá, han dejado el título en bandeja para Lucas di Grassi, del equipo Abt Schaeffler Audi Sport, el cual se ha llevado dos victorias esta temporada.
Buemi se ha mostrado desquiciado durante todo el fin de semana, y un accidente innecesario durante los libres dos condicionó su actuación durante la jornada del sábado, que acabó con el suizo encarándose con hasta tres pilotos al finalizar la carrera y con una posterior exclusión al no haber dado el peso mínimo, comprobación que el equipo no pudo hacer debido a las prisas por reparar el vehículo. Con pocas posibilidades para la última carrera, Buemi se encargó de dilapidarlas más aún con una muy mala clasificación que le hacía salir al fondo del pelotón. Un posterior toque en la salida y un paso por boxes extra para quitar una pieza colgante imposibilitó cualquier tipo de remontada, confirmándose así el título para di Grassi.
Di Grassi se lleva el mérito de haber vencido con un vehículo considerado peor que los todo poderosos Renault e.dams, pero sabiendo que difícilmente podría haberlo logrado si el suizo no hubiera tenido que cumplir sus obligaciones como piloto oficial Toyota. En el campeonato de equipos sin embargo, Renault si revalida título, el tercero en tres años, ya que la labor de sumar puntos cayó en manos de los dos protagonistas ya que las actuaciones de los “hijos de”; Nicolas Prost, en el caso de Renault, gestionado por Alain Prost, y de Daniel Abt, en el caso del Abt Audi Sport, equipo gestionado por Hans-Jürgen Abt, han dejado mucho que desear, sin haber logrado siquiera subirse al podio en todo el año.
En tercera posición en la clasificación de equipos finaliza un debutante, Felix Rosenqvist, con una victoria y cinco podios en su haber, a 54 puntos del título y haciendo que su equipo, Mahindra, estructura india gestionada por Campos Racing, también acabe en tercera posición en la clasificación de equipos, por delante de DS Virgin.
Por lo tanto, Lucas di Grassi se une al club que ya componían el propio Buemi, ganador la pasada temporada con solo dos puntos de margen sobre el propio di Grassi, y Nelson Piquet jr, cuya temporada ha sido tan mala como la anterior pero que sigue siendo el primer ganador de la Fórmula E, arrebatándole el título a Buemí por un solo punto y a Di Grassi por once. Hasta el momento, los títulos de Fórmula E siguen reservados a pilotos polémicos fuera de la pista y con pasado en Fórmula 1.
Ahora, tiempo para reflexionar, pues la próxima temporada de Fórmula E no dará comienzo hasta el próximo mes de diciembre con una doble cita en Hong Kong, temporada programada a catorce carreras y que finalizará el 29 de Julio.
