Sauber se enfrenta a la próxima prueba del Mundial, el Gran Premio de Estados Unidos, que se celebra este fin de semana en el Circuito de las Américas. Tras tres carreras asiáticas en el último mes, la Fórmula 1 viaja a un nuevo continente. La última ronda de carreras seguidas tendrá lugar en las próximas dos semanas.

El año pasado los de Hinwil celebraron su GP número 400 en Texas. Allí Felipe Nasr anotó dos puntos tras terminar entre los diez primeros. “El año pasado el GP de EE.UU. estuvo lleno de acontecimientos, las condiciones meteorológicas hicieron la carrera emocionante. Terminar noveno fue un buen logro, si se tiene en cuenta que era el GP número 400 de Sauber. Si pensamos en este año, tengo ganas de volver a pilotar en este gran circuito de nuevo. Lo haré lo mejor que pueda para conseguir un resultado similar al del año pasado, anotar puntos es obviamente nuestro objetivo”, ha comentado el brasileño en el habitual previo que publican en su página web los de Hinwil antes de cada evento del calendario.

El Circuito de las Américas tiene más curvas rápidas que Spa-Francorchamps y más lentas que Hungaroring. La combinación de ambas lo hace un reto muy complejo desde el punto de vista de la ingeniería. “Creo que todos recordamos el nada habitual GP de EE.UU. 2015 por la fuerte lluvia. Tengo ganas de volver este año, ya que me gusta esta pista mucho. Es un buen evento en el circuito y Austin es un gran lugar en el que estar”, ha expresado Marcus Ericsson.