La sesión de calificación del Gran Premio de Australia ha dejado buen sabor de boca en el equipo Sauber, que ha visto como el recién llegado, Felipe Nasr, ha estado a punto de colarse en la Q3. Finalmente la mejora de sus rivales en el último instante le dejó con la miel en los labios y una undécima posición que le permite encarar la carrera con el objetivo claro de puntuar en su estreno.

"Como equipo podemos estar contentos, ya que casi conseguimos meternos en Q3", ha comentado el brasileño. "No participar en la primera tanda libre del viernes hizo que afectara al comportamiento del coche en cierto modo y, por mi parte, he tenido menos tiempo para conocer mejor la pista. En general estoy satisfecho por el resultado y espero impaciente la carrera. Mañana es un día muy importante con mi primera carrera en la Fórmula 1 y trataremos de buscar los puntos".

Menos suerte ha tenido su compañero Marcus Ericsson, que tras romper la suspensión trasera de su C34 en el día de ayer, no se ha encontrado con el mismo monoplaza tras los últimos retoques en el setup del coche. Así, sólo ha podido ser decimosexto y se plantea la carrera con el objetivo de cruzar la línea de meta y acumular kilómetros y datos importantes para el futuro.

"Fue una sesión decepcionante para mí y para el equipo con esta 16ª posición y no podemos estar satisfechos", ha señalado. "Al acabar ayer, tenía bastante confianza en el coche, pero hoy lo he sentido diferente y fue muy extraño sobre todo en las frenadas, siendo sincero. Necesitamos analizar los datos esta noche para ver que ha cambiado con respecto a ayer, del modo que podamos comprender lo sucedido y con el objetivo de aguantar y acabar la carrera. Será un nuevo día", ha confesado.

Por su parte Monisha Kaltenborn, jefa del equipo, se ha mostrado muy contenta por confirmarse las buenas sensaciones de la pretemporada en el momento donde todos han mostrado sus cartas, lo que les ha hecho ver que el trabajo invernal ha dado sus frutos y pueden estar en la lucha por los puntos de manera constante.

"Estamos contentos de confirmar la impresión positiva que tuvimos en las pruebas de invierno. Es también agradable ver al coche más cerca con el resto, algo que da una motivación adicional al equipo. Llegamos a la carrera con perspectivas buenas para un resultado positivo", ha señalado.

Por último Giampaolo Dall'Ara, ingeniero jefe de pista, ha afirmado que el rodaje en los Libres 3 les ha hecho recuperar los kilómetros perdidos el viernes, con lo que han conseguido un mejor balance del coche para afrontar la sesión de calificación, de la que salen contentos a pesar de los problemas de frenos de Ericsson.

"La primera hora de la sesión de la tarde nos permitió recuperar un poco los kilómetros que perdimos ayer, donde fuimos capaces de conseguir el equilibrio del coche", ha apuntado. "Sin embargo, el cambio de las condiciones climatológicas en la Q1 pilló desprevenidos tanto Marcus como a Felipe, lo que hizo que la sesión no fuese tan bien como hubiésemos querido. Lamentablemente Marcus cayó eliminado en la primera tanda y sólo nos metimos con Félipe a la siguiente ronda", ha proseguido.

"Fue en la siguiente sesión cuando cogimos más confianza en el coche y Felipe hizo un buen trabajo al lograr la undécima posición, con la cual podemos estar contentos como punto de partida. Tuvimos un pequeño fallo con el rendimiento en frenada, que afectó particularmente a Marcus y que le hizo perder algo de confianza. Sin embargo, en general, fue un buen día y afrontamos la carrera de manera positiva", ha concluido.