Jolyon Palmer, piloto de Renault, ha descrito su Gran Premio de China, como el peor de toda su carrera deportiva. Después de clasificar el sábado en el puesto 19º en Shangái, tuvo un "catastrófico" rendimiento y terminó la carrera en el último lugar.

Hasta ahora el británico y su equipo no han conseguido entender la razón por la que les falta el rendimiento en el RS16, tras un sólido comienzo en Australia. "Estamos bajos en aerodinámica y lo pude ver en la clasificación", ha señalado Palmer para la publicación Autosport.

"Había también algunas partes dañadas en la clasificación, aún así, nos las arreglamos para solucionar la mitad del problema para la carrera, pero falta aerodinámica. El coche de seguridad, después de explotarle un neumático al Red Bull de Daniel Ricciardo en la tercera vuelta, definitivamente, no fue bueno para la estrategia. Pero creo que tenemos que entender lo que pasa con el coche primero y luego centrarnos en la estrategia. En general, para mí, personalmente, creo que en todo el fin de semana fue quizás el peor como piloto de carreras. Ha sido muy malo", ha insistido.

Palmer quedó poco satisfecho tras completar este GP, tras el fallo hidráulico que le impidió salir en Bahréin. "Es una buena experiencia, pero una experiencia dura porque se ve bastante mal. Estoy seguro de que vamos a recuperarnos y entonces todo esto será una experiencia útil. Aún así aprendo. Sólo he hecho dos GPs en mi vida, que no han sido positivos, pero por el momento el aspecto negativo es que el ritmo es bastante malo y eso, obviamente, trae como resultado el que todo se venga abajo", ha reconocido el británico.

Palmer se ha comprometido a tratar de entender, en una visita a la fábrica de Enstone esta semana, los problemas que sufrió antes de la próxima carrera en Rusia. "Voy a indagar a través de los datos obtenidos y en el simulador, pero básicamente, se trata de analizarme a mí mismo para ver lo que pasa", ha finalizado.