Una nueva actualización de motor que el propio motorista no quiere arriesgarse a montar su propio equipo. Así se presentó la especificación ‘C’ de la unidad de potencia 2018 de Renault. Cyril Abiteboul explicaba que presente a las mejoras de potencia que había presentado el propulsor en banco de pruebas, había riesgos en término de fiabilidad, motivo por el que la propia Renault se negó, al menos de momento, a montarla en su propio equipo. Sí decidió montarla Red Bull, con menos que perder en su actual situación de tierra de nadie.

La apuesta le salió bien a los de la bebida energética con la gran carrera que Max Verstappen se marcó en Singapur, consiguiendo la segunda posición, pero tal y como confesó Christian Horner, habían sufrido en exceso con la gestión del motor. Verstappen se quejó incesantemente de comportamiento anómalo del motor, el cual no impidió cosechar el buen resultado.

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Recientemente Horner ha admitido, que tras especularse nada más acabar la carrera de Singapur, definitivamente sí, van a regresar a la especificación ‘B’ de la unidad de potencia Renault. Red Bull quiere trabajar más con los mapas y gestión del motor, para hacer de la especificación ‘C’ su motor de final de temporada, pero no ha sido posible tenerlo suficientemente preparado para Sochi.

En Sochi, se requiere mucha potencia debido a las largas rectas, algo de lo que carece tanto Red Bull como las unidades de potencia Renault, por lo que han aceptado que van a sufrir este fin de semana, descartando de primeras poder repetir un resultado que les lleve al podio.

De hecho, Horner señala directamente a México como única posibilidad de lograr una victoria en circunstancias normales en lo que resta de temporada, tal y como ha ocurrido en temporadas anteriores, donde las condiciones de altitud del autódromo Hermanos Rodriguez aumentaban la competitividad del Red Bull. En Sochi, de primeras, toca sufrir.