Renault encaraba la temporada con esperanzas de ponerse a la altura de Mercedes y Ferrari gracias a un concepto de motor totalmente nuevo. El fabricante francés decidió apostar por una unidad de potencia distinta de la versión anterior para así dar un salto en rendimiento y fiabilidad, dos aspectos donde Renault se quedó atrás desde el comienzo de la era híbrida.

Este nuevo diseño no ha cumplido con ninguna de las expectativas de la marca francesa. El rendimiento de la unidad sigue estando claramente por detrás de Mercedes y Ferrari e incluso algunas personalidades del paddock se atreven a señalar que Honda ha adelantado a Renault. El motor tampoco ha mejorado en cuanto a fiabilidad, sufriendo numerosos problemas en las primeras carreras del año.

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La MGU-K es el elemento que más dolores de cabeza ha causado a Renault. Se trata de una de las piezas más delicadas del motor, pues solamente se permiten dos unidades para toda la temporada. Para el Gran Premio de China, Renault decidió estrenar una actualización de la MGU-K en todos sus monoplazas, lo que les puso al borde de las penalizaciones en parrilla.

Renault se dio un buen susto cuando Nico Hulkenberg tuvo que abandonar la carrera en Shanghái debido a un fallo en la MGU-K. En caso de que el germano necesitara una nueva unidad de este elemento, se vería obligado a empezar la carrera de Azerbaiyán desde el fondo de la parrilla debido a la sanción que recibiría, pero parece que no será necesario por el momento.

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Hulkenberg podrá volver a utilizar esta unidad de la MGU-K en Bakú ya que Renault ha sido capaz de repararla, así que se libra de la sanción. De todas formas, en la estructura francesa reconocen que tienen que trabajar en mejorar la fiabilidad de los motores para así poder luchar por defender la preciada cuarta posición del mundial de constructores.

“Tuvimos otra retirada en China, la cuarta de seis posibles. Tres de ellas se debieron a problemas de fiabilidad. Si nuestro objetivo de la temporada sigue siendo el mismo, ampliar nuestra ventaja en la zona media, debemos aceptar que tenemos que trabajar para resolver estos problemas que podrían comprometer nuestra campaña, declaró Cyril Abiteboul.