La petrolera BP Castrol y el fabricante Renault han acordado ampliar la relación laboral que les unía en Fórmula 1 por un periodo de cinco años más. Se trata por tanto de la confirmación de la conformidad de Renault con el combustible y lubricante suministrado por BP, ya que ambas marcas comenzaron a trabajar juntas el pasado año, finalizando Renault una larga relación que le unía a Total.

En la mano de Renault estaba buscar una alternativa, pues tanto el combustible como el lubricante se convierten en un elemento crítico en un vehículo de Fórmula 1, con la capacidad de tirar al traste todo el trabajo con solo un pequeño error de cálculo.

Indirectamente, la prolongación del acuerdo de colaboración beneficia también a McLaren, quién también en 2017 rompió con ExxonMobil, que se marchó a Red Bull, para comenzar a trabajar con BP Castrol. Por lo que ahora que ambos equipos compartirán la combinación Renault – BP, la obtención de datos será el doble, facilitando el trabajo de los ingenieros.

El presidente de Renault Sport Racing, Jerome Stoll, se mostró muy satisfecho con la prolongación del acuerdo; “Estamos tremendamente orgullosos de anunciar este fortalecimiento significativo de nuestra relación con BP Castrol después de haber establecido unas bases sólidas y estables en 2017.”

Por parte de BP, Tufan Erginbilgic también incidió en la importancia que el acuerdo tendrá en la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, señalando la capacidad para aportar nuevas soluciones de movilidad, más allá de la Fórmula 1.

Desde Renault también se ha querido señalar que BP Castrol ocupará una parte significativa en la decoración del coche, aunque sin aclarar si mayor a la que un ‘partnership’ acostumbra a tener.