La temporada de Daniel Ricciardo empezó de la mejor forma posible. Un cuarto puesto en Australia y, aunque un fallo en el monoplaza le privó de un buen resultado en Bahréin, la victoria no tardó en llegar. El australiano conquistó la carrera en China y repitió en Mónaco. Un gran comienzo de año que, desde Austria, parece no haber podido reproducir.

Con los dos abandonos consecutivos, en Bélgica e Italia, su compañero Max Verstappen le ha adelantado en la clasificación. Aun así, el australiano no desiste y seguirá dando el máximo lo que resta de temporada.

“Ha sido la temporada más rara de mi vida. Ganando dos de las primeras seis carreras, ha sido posiblemente el comienzo más fuerte que he tenido en una temporada de Fórmula 1. Después de Mónaco, pensaba que esta temporada parecía prometedora y que probablemente habría una opción para luchar por el título. Sigo sintiendo que piloto bien y me aplico al máximo, pero por algunas razones no ha funcionado desde entonces. Mi confianza nunca se ha disipado pero mi motivación y mi amor por el deporte ha disminuido un poco, aunque tiendo a recuperarme bastante rápido”, explicó Daniel Ricciardo en una entrevista en la página oficial de Red Bull.

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Al piloto australiano le quedan solo seis carreras para quitarse el mono de Red Bull por última vez. Ricciardo protagonizó un movimiento que conmocionó a todo el paddock. Aún no es consciente de su marcha a Renault y no lo verá real hasta que finalice el último gran premio de la temporada, listo para un nuevo capítulo de su vida.

“Se siente mayormente real, pero sinceramente, cuando la bandera a cuadros caiga en Abu Dhabi y me quite el mono de Red Bull por última vez, es cuando me va a afectar. No es tanto lo de ‘mudarse a Renault’ si no de ‘cerrar un capítulo en esta parte de mi carrera’. Desde un punto de vista emocional, es lo que me va a golpear. He llevado el casco de Red Bull por más de una década. Ha sido un viaje divertido y ciertamente no nos separamos con malos términos. Estoy listo para algo nuevo. Voy a cumplir 30 el próximo año y sentí que era hora de la siguiente parte de mi vida”, analizó el australiano.

La próxima temporada, Ricciardo se embarca en un proyecto con el que sabe que no conseguirá buenos resultados a corto plazo, pero es una manera de desafiarse a sí mismo y no caer en una rutina tras mucho tiempo en un mismo equipo.

“Puede sonar tonto, pero, habiendo estado tanto tiempo con Red Bull, sentí que era hora de tomar una decisión por mi mismo. Ha sido una muy buena etapa con Red Bull, a veces muy fácil porque todo era familiar. Hubiera sido muy fácil caer en la rutina y no quería que eso sucediera. Quería desafiarme a mi mismo de nuevo”, matizó el todavía piloto de Red Bull.