Llegamos a mitad de temporada y son muchos los equipos que se encuentran al borde de la penalización por sobrepasar el número máximo de compuestos. Uno de ellos es Daniel Ricciardo, que desde la carrera de Mónaco, en la cual el piloto australiano se llevó la victoria, en la que sufrió un problema con el MGU-K de su monoplaza, están valorando la posibilidad de penalizar en las próximas carreras, aunque finalmente pudieron recuperar la pieza estropeada y retrasar lo máximo posible la sanción.
Se esperaba que el de Red Bull penalizase en el Gran Premio de Canadá, pero pudieron reutilizar componentes antiguos. Y tampoco querían penalizar en la carrera de Hungría porque, a priori, es un circuito que se adapta a su monoplaza, “Hungría es una buena oportunidad para nosotros ya que no depende tanto del motor y tenemos oportunidades para ganar”, aseguró Christian Horner sobre el trazado de Budapest.
Es muy probable que finalmente cambien unidades de su monoplaza para la carrera de Alemania y monten el nuevo MGU-K actualizado de Renault, el cual Carlos Sainz, Nico Hulkenberg y Stoffel Vandoorne ya montaron en Austria y que, Red Bull, para evitar esta sanción en su carrera de casa, optaron por no utilizarla todavía. El circuito de Hockenheim es favorable para los adelantamientos y aunque comience la carrera en una posición retrasada, podría recuperar puestos en la pista.
Ricciardo es el piloto de Red Bull que más componentes ha sustituido en su monoplaza, aunque Verstappen a fue sancionado por el tercer MGU-K, aún dispone de margen para otras piezas.
