Rob Smedley ha aceptado el cargo que le ha propuesto la F1 y será nuevo consultor técnico dentro de la competición. El británico abandonó su puesto como jefe de rendimiento de ingeniería en Williams a finales de la temporada pasada, pero dejó claro que quería seguir vinculado a la competición reina del automovilísmo.

Williams no fue la única escudería en la que trabajó Smedley ya que estuvo 20 años trabajando con varios equipos del paddock como Ferrari. Ahora a decidido alejarse de toda esa parte y asumirá un nuevo rol dentro de la F1, al igual que hicieron otros excompañeros como Ross Brawn y Pat Symonds.

"Está claro que tomé la decisión de tomar un poco de distancia al frente de los equipos. Pero todavía tengo una gran pasión por la Fórmula 1 y espero que esta sea una forma de devolverle un poco al campeonato", dijo Smedley según declaraciones recogidas en el portal web Motorsport.com.

La nueva incorporación del británico no implicará que éste trabaje en el desarrollo de futuros reglamentos técnicos. Su tarea se centrará en aportar experiencia para la transmisión de la F1 "en todas sus plataformas".

"Se trata de intentar emitir un mensaje coherente desde el plano técnico de la F1. En las conversaciones con Ross, ambos coincidimos en que existe una gran cantidad de contenido técnico, de datos, de la forma en que operan los equipos, que en realidad nunca se cuenta", aseguró.

"Es parte de la historia en la que se basa la F1, que en realidad el público que paga, el aficionado, nunca llega a ver o pueden ver muy poco de ello. Así que hay una oportunidad por delante para trabajar en eso", dijo el británico para terminar.