En sus dos temporadas en la Fórmula 1 actual, la escudería Mercedes se ha situado como la mejor alternativa a los tres equipos punteros (Red Bull, McLaren y Ferrari). Asentados en la cuarta posición de la clasificación en 2010 y 2011, desde Brackley afrontan la nueva campaña con el objetivo de estar regularmente en el podio y lograr la primera victoria, triunfo que se les sigue resistiendo.

Formando una de las parejas más competitivas de la parrilla, Nico Rosberg ha afirmado que en Mercedes, tanto él como su compañero de equipo, Michael Schumacher, cuentan con las mismas posibilidades y oportunidades para ganar. "Competimos en igualdad de condiciones y eso hace que todo sea mucho más llevadero. Al principio del año pasado, le tenía mucho respeto (a Michael) pero ahora todo está normalizado. Respeto su dedicación por el deporte y su enfoque. Es interesante de ver", señalaba Rosberg a la publicación Car.

En los dos años que Schumacher y Rosberg comparten box, el de Wiesbaden se ha clasificado por delante del heptacampeón en la mayoría de ocasiones. Aunque la diferencia en cuanto a rendimiento fue mayor en el año de regreso del Kaiser a la F1, el joven alemán siguió marcando el ritmo en 2011. Sin embargo, la distancia entre ambos se redujo considerablemente la temporada pasada.

En opinión de Rosberg, la mejoría en la competitividad de Schumacher se debe a las novedades que se introdujeron en la normativa del pasado año. "Acortó distancia en la clasificación del Campeonato de Pilotos en comparación con 2010, pero todo se debe a los neumáticos y al DRS, que hicieron que los adelantamientos fueran más constantes. La cualificación perdió toda su importancia en 2011 y ésa fue la explicación principal. Pero Michael también mejoró su rendimiento", afirmaba Rosberg.

A unos días para iniciar la segunda semana de entranamientos invernales, Mercedes presentará su nuevo monoplaza, el W03, el próximo 21 de Febrero a las 08:20 (hora española) en el pitlane del Circuit de Catalunya. Con la flecha plateada de 2012, Schumacher, Rosberg y los miembros de Brackley tendrán un único objetivo en mente: luchar por las victorias y saborear el champagne cada domingo de Gran Premio.