Marcus Ericsson se ha mostrado gratamente sorprendido por las mejoras que el equipo Sauber ha traido al Gran Premio de Alemania, que incluso le han permitido ser 11º en la primera sesión de Libres y que por ello las mantendrán el resto del fin de semana.

"Ha sido un viernes decente. Fui capaz de rodar bastante en ambas sesiones. Intentamos un nuevo alerón trasero de vuelta en los Libres 1, y finalmente vemos los números que queríamos. Seguiremos con el análisis, pero parece un paso hacia adelante. También planeamos seguir con esta ala trasera el resto del fin de semana, lo cual es una señal positiva. Veremos hasta dónde llegamos mañana", ha explicado Ericsson.

En el otro lado del box, Felipe Nasr no comparte sensaciones con el piloto sueco, dado que no se sintió cómodo e abordo del C35 #12 y cree que no es un buen momento en el año para ellos. El brasileño tampoco se siente cómodo con el rendimiento de los neumáticos en Hockenheim.

"Ha sido un día difícil para mí. No me siento cómodo en el coche. La manejabilidad del coche es bastante mala ahora mismo. Tampoco pudimos hacer trabajar bien a los neumáticos, así como el set-up del coche. Los problemas llegan de diferentes partes del coche. Debemos solucionarlos de cara al resto del fin de semana", ha concluido Nasr.