Después de haber conseguido acumular tres podios seguidos en la recta final de la primera parte de la vigente temporada, Williams decepcionó en el GP de Hungría, donde no pudieron superar la 5º posición, y aunque acabaron con ambos coches en los puntos, perdieron el pulso por la tercera plaza en el campeonato mundial de constructores en favor de Ferrari, gracias al podio logrado por Fernando Alonso.

Pero, ¿quién tuvo la culpa? Probablemente, lo más fácil sería apuntar a la estrategia desde el muro de boxes, que claramente falló a la hora de escoger los neumáticos duros, mientras el resto de la parrilla acertó montando los blandos en sus monoplazas.

No obstante, el jefe de rendimiento de la legendaria escudería británica, Rob Smedley, considera que el fallo principal fue el no poderle sacar partido al FW36 en condiciones climáticas más frías de lo habitual.

"No creo que hayamos perdido mucho en el punto de vista estratégico, honestamente", señaló Smedley. “El problema principal fue el ritmo del coche”.

"Veníamos de las últimas cuatro pruebas en las que tuvimos el segundo coche más rápido, pero eso puede cambiar fácilmente hasta tener el quinto monoplaza más veloz", dijo. "Íbamos bien con las temperaturas elevadas, pero la pista se enfrió hasta los 18-20ºC y simplemente no pudimos sacar ritmo del coche", explicó el británico.

A diferencia de lo que asegura Smedley, muchos atribuyen el ‘mal’ resultado de Williams a un error en la estrategia. Sobre todo al escoger los compuestos en las paradas, dado que mientras la mayoría de la parrilla montaba neumáticos blandos, desde la escudería de Grove consideraron que no llegarían hasta el final sin otra parada, y calzaron los medios en el FW36.

"Desde la vuelta 23, cuando el segundo coche de seguridad salió, simplemente no creímos que pudiésemos dar 25 vueltas con los neumáticos blandos. Finalmente se vio que, de hecho, se podía hacer mucho más que eso, así que necesitamos entender más sobre el manejo de las gomas en esas condiciones", citó el ex de Ferrari. "Ciertamente, no hicimos un gran trabajo en el sentido de cómo actuamos en carrera y no creo que haya sido tan desastroso: acabamos con ambos coches en los puntos", reconocía Smedley.

Por otra parte, el piloto revelación de esta temporada, Valtteri Bottas, ve las cosas desde una perspectiva distinta a la de Smedley, dado que el finés considera que el equipo sí se equivocó gravemente con laestrategia, lo que acabó comprometiendo el resultado final.

"Definitivamente, esa fue una posibilidad para hacerlo mejor como equipo", dijo Bottas. “El aspecto principal fue el poder coger temperatura con los neumáticos de seco, lo cual nos llevaba mucho tiempo", señaló el de Williams, que para cuando tuvo sus gomas en la ventana óptima de rendimiento ya era demasiado tarde.

"Cada vuelta mejoraban, y cuando los neumáticos empezaron a trabajar, ya era demasiado tarde", concluyó.