La vida en Red Bull es el claro ejemplo de la cara y la cruz de una moneda. Mientras que las cosas le sonríen a Max Verstappen, en el lado del garaje de Pierre Gasly es más bien lo contrario. Está sufriendo mucho para poder extraer el máximo del RB15 y apenas ha podido asomar la cabeza para poner el coche donde debería.
Hoy, tras los entrenamientos libres tampoco lo ha conseguido y la novena posición ha sido bastante decepcionante en general. Pero eso no ha sido lo peor. Gasly no ha acudido al pesaje de la FIA al término de la sesión y en consecuencia ha sido penalizado de forma contundente. Este tipo de sanciones son bastante frecuentes en categorías de promoción tales como la Fórmula 2, pero en Fórmula 1 son de lo más insólitas, aunque no inéditas.
“Los comisarios han revisado el video de la incidencia y han escuchado lo que ha dicho el piloto del coche número 10 [Gasly] y el responsable del equipo, determinando que el piloto es el culpable de no realizar el pesaje cuando se le ha requerido a hacerlo. En su lugar, ha seguido hasta su box para hacer un ‘pit stop’”, reza el comunicado que ha emitido esta tarde la FIA.
De esta forma, Pierre Gasly va a tener que empezar la carrera del domingo desde la última posición en la que va a verse obligado a remontar cuando lo que el piloto necesitaba era hacer una buena clasificación y obtener un resultado positivo para empezar a ser útil para su equipo. Pero salir desde la calle de boxes va a dificultarle en gran medida el poder lograrlo.
Todas estas circunstancias no estarán gustando en el seno de Red Bull. Christian Horner y, especialmente Helmut Marko, estarán enfadados por lo ocurrido y esperarán a ver qué puede ofrecer su piloto en la carrera del domingo, pero de no acabar en los puntos se podría entrar en un vórtice peligroso y todos sabemos que la paciencia no abunda en el equipo de Milton Keynes precisamente.