El equipo McLaren comenzó el fin de semana con fuerza. Incluso terminando sesiones de entrenamientos como los más rápidos solo por detrás de los tres equipos intocables. En cualquier caso, no se trataba más que una continuidad de lo ya visto en el Gran Premio de España o en Mónaco, donde mostraron potencial para estar en esas posiciones altas.

Más aun con la introducción de la nueva unidad de potencia Renault, que se esperaba fuese capaz de dar ese plus, especialmente tras hacerse público que la actualización de la unidad de potencia Mercedes, con Force India como máximo rival de McLaren en este sentido, se había retrasado.

Pero al llevar la clasificación, el rendimiento del McLaren fue nefasto, y ya en la primera Q1 rozaron el quedar eliminados, finalizando la Q2 en las últimas posiciones y dejando un sabor de boca muy amargo. Boullier explicaba que era conocedores de que aquí lo iban a pasar mal por un problema localizado del McLaren, concentrado en la tracción en curvas de baja velocidad.

Vandoorne contradice director, y asegura que lo visto en clasificación ha sido sorprendente para ellos. “No hemos sido competitivos en absoluto. Es un poco extraño porque ayer tuvimos un buen ritmo sin llegar a montar los hiperblandos. Creíamos que había posibilidad de llegar a la Q3, y desde que comenzó la clasificación, se vio que no teníamos la velocidad para llegar ahí”.

No había nada especialmente malo en el coche. El equilibrio era bueno. No hay nada que comentar, simplemente, no éramos rápidos. Hay que aprender qué hacer porque esperábamos estar más arriba.”, concluyó el belga.