Abu Dhabi es una de las carreras más especiales del año. Cierra la temporada y al ser una cita disputada al atardecer hace que el ambiente sea festivo.

Con las posiciones ya decididas, se trata de una cita que servirá a los pilotos para poner punto y final a otra temporada de Fórmula 1.

“Aparte de ser la última carrera del año, Abu Dhabi siempre es especial por su ambiente. Los seguidores son ruidosos y que sea al atardecer hace que se sienta única. Después de unas carreras atareadas, creo que todos tenemos ganas de ir a Abu Dhabi. El buen tiempo y el ambiente relajado en el paddock significa que todos sonríen”, explicó Max Verstappen.

Yas Marina es un trazado bastante técnico y con una gran recta que no favorecerá a los monoplazas de Red Bull, pero eso no desanima a Verstappen.

“Es divertido para conducir. Pasar los yates en el último sector es una sensación similar a Mónaco, pero no es tan difícil. Hay algunas rectas largas que realmente no se nos darán bien, pero trataremos de compensarlo con los sectores revirados”, comentó el neerlandés.

Tras la última carrera de la temporada, los pilotos disputarán dos jornadas de test para probar ciertos elementos de cara a 2019 para poder empezar a desarrollar el monoplaza del próximo año cuanto antes.

“Una vez finalizada la carrera, el equipo puede relajarse un poco y tener un periodo de inactividad bien merecido. Por supuesto, tenemos test poco después, pero definitivamente trataré de relajarme y tomar el sol el lunes. Antes de que nos demos cuenta, estaremos probando y trabajando duro para 2019 durante todo el invierno, lo que es emocionante”, concluyó.