Max Verstappen no ha comenzado el Gran Premio de Abu Dhabi con buen pie. El neerlandés fue el más lento de los seis pilotos punteros en una segunda sesión de libres en la que se quejó en varias ocasiones de falta de agarre. Verstappen también usó un motor antiguo que será reemplazado por uno más nuevo para la jornada de sábado. A pesar de las mejorables sensaciones, el piloto de Red Bull confía en que pueda luchar por la primera fila de la parrilla.

“Probamos diferentes cosas para ver qué era mejor para las condiciones. Estaba contento en el primer entrenamiento, pero no tanto en el segundo. Sabemos que lo que cambiamos me impidió girar tanto como me gustaría, pero deberíamos poder arreglar eso para mañana. Necesitamos mejorar el ‘set-up’, pero aun así no estamos demasiado lejos”, declaró Verstappen al terminar la jornada.

“El motor que usé hoy es uno nuevo y una mejora en el ‘set-up’ nos debería permitir estar en una buena posición. Mercedes parece que sigue siendo el equipo a batir, al igual que durante el resto del año. Intentaremos acercarnos todo lo que podamos”, añadió el neerlandes.

Verstappen buscará terminar una difícil temporada de forma positiva. Los múltiples problemas mecánicos que sufrió al principio de la campaña le costaron una gran cantidad de puntos que le han relegado al sexto puesto de la clasificación a pesar de sus victorias en Malasia y México. Por ello, el neerlandés querrá finalizar la última carrera del año en el podio para despedirse de la temporada con un buen sabor de boca.