No comenzó con mal pie la unión entre Red Bull y Honda. Los de la bebida energética venían de una relación complicada con Renault, con mucho cruce de acusaciones que estuvieron cerca de acabar de forma dramática.
El comienzo de temporada, con Red Bull en el podio y los Renault con evidentes problemas de fiabilidad no hicieron más que aumentar la sensación de los chicos de la bebida energética de que habían tomado la decisión correcta. Sin embargo, la marca del rombo se ha puesto las pilas. Identificó el origen de sus problemas y en Mónaco introdujo modificaciones que ya no hacen temer por la fiabilidad y les permite destapar todo el potencial de su unidad de potencia.
Red Bull sigue sin sufrir ante el empuje de Renault y McLaren en carrera, pero tal y como se puede leer entre líneas de los comentarios vertidos por Max Verstappen, deben andarse con ojo. El piloto neerlandés admite la superioridad de Renault a una vuelta, confesando además que lo pasa mal al comienzo de carrera, cuando los del rombo activan algún modo especial, explicando que si bien es cierto que no pueden mantenerlo en el tiempo y acaban cediendo terreno, la primera vuelta resulta complicada.
Pese a que desde Red Bull no dudaron desde un primer momento en echarse la culpa de la falta de rendimiento del RB15, Verstappen no lo tiene tan claro. “El equilibrio del coche no es malo, solo necesitamos ganar rendimiento para ser realmente competitivos. Necesitamos dar un gran paso con el motor”, aseguró el neerlandés, siendo la primera crítica abierta que se realiza desde que hace poco menos de un año se confirmarse el cambio de Renault a Honda para los austriacos.
Red Bull no se muestra especialmente optimista de cara al Gran Premio de casa después de que la última actualización de Honda no significase un gran paso, más teniendo en cuenta las características del Red Bull Ring y sus largas rectas. “No será mejor que en Francia, hay que ser realistas. Hay muchas rectas y pocas curvas en las que ganar tiempo, si es que de verdad lo ganamos, porque en estos momentos no cero que seamos superiores”, concluyó un poco esperanzado Max Verstappen.
