Las declaraciones de Jacques Villeneuve jamás pasan desapercibidas. El campeón del mundo de 1997 es tan peculiar dentro como fuera de la pista. Si el año pasado la tomó con Lance Stroll, compatriota al que parece no tener demasiada estima, en esta ocasión es Lewis Hamilton el objetivo de sus palabras.

El canadiense convierte al británico en un personaje bíblico, pues lo compara con el mismísimo Jesucristo. Para Villeneuve, el GP de Alemania fue una escenificación perfecta de lo que representa Hamilton ante el público; dramatismo el sábado y milagro acompañado de lluvia épica y repentina el domingo.

“Lewis no debería sorprenderse. Confunde la Fórmula 1 con Hollywood. Se retrata a sí mismo en las redes sociales como si fuera Jesús, afirma Villeneuve a Auto Bild. “La forma en la que se arrodilló junto al coche después de su problema en clasificación se parecía al sufrimiento de Cristo. Y lo que dijo después fue el Sermón del Monte. Luego hizo un gesto tan dramático en el podio que todos pudieron ver quién envió la lluvia repentina, añade.

La personalidad de Hamilton es la más peculiar de la parrilla. El británico no tiene pelos en la lengua y tras la carrera del domingo en Hockenheim, lanzó un dardo envenenado hacia los comentaristas de Sky, pues supuestamente no hicieron ningún tipo de reconocimiento hacía el cuatro veces campeón del mundo. Hamilton borró el comentario poco después, aunque Toto Wolff, jefe de equipo de Mercedes, le alentó para que no borrase la publicación.

“Le alenté para que lo dejara publicado en las redes y dijera lo que pensaba. Es lo que necesitamos. Necesitamos crear historias. Necesitamos controversias. Necesitamos posturas polarizantes, concluye.