El trío calavera del Motorsport; Fernando Alonso, Zak Brown y Gil de Ferran, se volvió a dar cita en las 24 horas de Le Mans, aunque cada uno, con objetivos muy distintos. Si hace unas semanas iban de la mano en el proyecto de McLaren en la Indycar, en la carrera de resistencia, los objetivos eran diferentes.
Fernando Alonso trataba de lograr su segundo triunfo en las 24 horas de Le Mans al tiempo que pensaba en el mundial de resistencia. Zak Brown soñaba con llevar a su equipo de LMP2, United Autosport, a lo más alto. Y Gil de Ferran, el cual portaba ropa de McLaren… bueno, de lo que hacía el brasileño en Le Mans, mucho se podría especular.
No ha pasado inadvertido el hecho de que nada se conoce del futuro de Fernando Alonso, ni a corto ni a medio plazo, y por supuesto, hay quién desea que el asturiano regrese a la Fórmula 1. Dada su condición de embajador de McLaren, equipo con el que ha realizado test este mismo año, resultaba sencillo preguntar directamente al máximo responsable de McLaren, aunque durante este fin de semana tuviera sus pensamientos en un lugar muy diferente.
Así lo hizo Auto Motor und Sport, si bien Zak optó por una respuesta muy diplomática… aunque al mismo tiempo, deseando que Fernando no le pusiera en este compromiso. “Nuestros pilotos tienen contrato a largo plazo, y además, estamos contentos con ellos. Afortunadamente, en ese sentido, Fernando no ha llamado todavía, no hay asientos disponibles en McLaren… quizás habría que preguntarle a Chase Carey si podemos poner tres coches…”, explicó el patrón de McLaren.
