La organización del Dakar, con Marc Coma a la cabeza ha decido implementar una medida no vista, al menos de forma premeditada, con anterioridad en el Rally más duro del mundo. Dicha medida permitirá a los pilotos saltarse parcialmente el trazado a cambio de una sanción de tiempo, suficientemente abultada como para ser eliminatoria de cara a la lucha por la victoria.
Tendrá lugar en la etapa 4, que unirá la ciudad argentina de San Salvador de Jujuy y la ciudad boliviana de Tupiza, una etapa de más de 500 kilómetros que tendrá 416 de ellos cronometrados. En cierto punto del recorrido se llegará a una zona de dunas con arena muy blanda a más de 4.000 metros de altitud, según palabras de Marc Coma. Aunque el Dakar lleva la dureza en el nombre, la organización no quiere que un tramo complicado suponga la eliminación de gran parte de la caravana ya en la etapa 4, por lo que creen que lo más acertado es disponer este tramo alternativo con el que saltarse las dunas.
El coger el atajo, lo que ahorrará unos 50 kilómetros de difícil terreno, tendrá una dura penalización de tiempo. Nada menos que 12 horas de tiempo añadido que eliminaría cualquier opción de victoria para los participantes, pero dará alas a las mecánicas más limitadas que simplemente sueñan con llegar a Buenos Aires y que acostumbran a ser los más perjudicados de trazados en los que los grandes prototipos de Peugeot, Toyota y X-Raid pasan sin esfuerzo.
Así hemos seguido el Dakar 2017 en Car and Driver
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