No pasó desapercibido el hecho de que en el anuncio oficial del regreso de McLaren a las 500 millas de Indanápolis, no se dieron más detalles del proyecto. Concretamente, no se dio ningún detalle más allá de que McLaren y Fernando Alonso estarían allí en 2019. Ni equipo, ni coche, ni motor…
McLaren lleva trabajando en este regreso el suficiente tiempo como para que este proyecto tenga muchas cosas, pero desde luego, no improvisación. De hecho, el motivo por el que la estructura británica no está a tiempo completo, es que la aventura no sería 100% como a ellos les gustaría. No es el caso de las 500 millas de Indianápolis, pues una única carrera permite trabajar de diferente manera.
La pregunta que entonces se suscitó, es si sería una fórmula similar a la empleada en 2017, cuando McLaren se integró en la estructura de Michael Andretti, usando un vehículo del ex piloto americano así como sus ingenieros y su material, pero todo bajo el nombre de McLaren. Un aficionado le trasladó esta pregunta al propio Andretti, que contestó afirmativamente, asegurando que sería una situación similar a la de 2017. Pero apenas unos minutos más tarde, Andretti eliminó dicho comentario y lo sustituyó por un mensaje de felicitación a Fernando Alonso por el regreso al mítico oval.
Zak Brown atendió a los distintos medios de comunicación, lanzando mensajes algo confuso, pues lo mismo decía que el equipo estará formado por personal actual de la Fórmula 1, o te explicaba que no tendrá ninguna interferencia en la Fórmula 1 o su personal. Clásicas incongruencias de cuando conoces tu proyecto, pero lo tienes que venderlo distinto a cómo es.
El equipo Andretti está actualmente motorizado por Honda, y también lo estará en 2019. Desde Honda Japón, no vieron con buenos ojos trabajar de nuevo de la mano de McLaren, tras el fracaso que ha supuesto el proyecto de Fórmula 1 entre ambos, que acabó con ruptura prematura de contrato.
Andretti, ligado a Honda, pero muy interesado en unir fuerzas con McLaren, ha intentado incorporar motores Chevrolet a su estructura, pero son varios los actores que no han visto con buenos ojos que un mismo equipo disponga de dos motores diferentes, a pesar de que no existe, a priori, una involucración de las marcas, sino que se trata de un sistema motor – cliente. Hay quién juzgó que tener los dos motores, daría ventaja a Andretti de alguna manera. Sin posibilidad de sacar adelante esta idea, McLaren pospuso su entrada a tiempo completo en la categoría, hasta que Andretti esté liberado de su contrato con Honda o hasta que se le permita añadir motores Chevrolet.
¿Y qué pasa con Indianápolis? Andretti llevará a cabo en las 500 millas de Indianápolis lo que quería hacer para toda la temporada, un vehículo, para Fernando Alonso, con los colores de McLaren, y tras el veto de Honda, con un motor Chevrolet. Pero deberá hacerlo de forma independiente.
Es decir, será personal formado en Indycar, del equipo de Andretti, el que se encargará del vehículo de Fernando Alonso, que será inscrito como estructura independiente. McLaren se beneficiará de toda la experiencia de este equipo, pero sin poder evidenciar una relación directa, o lucir sus logos, para no levantar suspicacias, especialmente en Honda, motivo por el que Michael Andretti decidió borrar sus huellos sobre su presencia en este proyecto de McLaren.
Una argucia demasiada compleja para algo que debería ser simple, pero que desde un motorista se han encargado de complicar, algo que ha evitado que McLaren dispute toda la temporada 2019 de la Indycar, pero que, lo más importante, no ha impedido que Fernando Alonso corra en las 500 millas de Indianápolis en la que será su primera oportunidad de lograr la ansiada triple corona.
Experto en Fórmula 1 y Motorsport, especializado en el mundo de las carreras y la competición a motor, la cual lleva cubriendo más de una década en diferentes medios del sector. Obsesionado de las categorías de formación y desconfiado por naturaleza de todo lo que le cuentan.
