No es la primera vez que te contamos cosas del AeroMobil, el coche volador fabricado en Eslovaquia y del que aquí te ofrecimos cumplida información. Pues precisamente el pasado fin de semana ha sido protagonista de nuevo gracias a su presencia en el Top Marques de Mónaco, el exclusivo evento del motor celebrado en el Principado.
Los planes de AeroMobil pasan porque el coche volador esté en el mercado en 2020 y por ello ya se admiten pedidos del AeroMobil Flying Car, un vehículo por el que sus creadores buscan ofrecer la máxima libertad a sus propietarios gracias a sus posibilidades de movilidad por tierra y aire y a su autonomía superior a los 750 kilómetros.
En cuanto a los detalles técnicos, desde la propia Aeromobil se han confirmado algunas características. La carrocería tiene una aerodinámica muy estudiada con la fibra de carbono como material principal en su composición para lograr la máxima ligereza. Las alas por su parte están fabricadas de composite, un material tipo resina muy resistente y formado por diferentes tipos de fibra y que es muy utilizado en la industria aeronáutica y espacial.
La cabina del AeroMobil Flying Car está diseñada para proporcionar la máxima seguridad gracias a una estructura monocasco de alta resistencia que es capaz de absorber y distribuir la energía en caso de impacto mientras se mantiene la integridad del interior. Además, los asientos incluyen un sistema de sujeción válido para su utilización convencional en carretera y para cuando se utiliza el vehículo por aire. La cabina también incluye una doble instrumentación. Los sistemas de control de vuelo se transforman rápidamente en segundos en una instrumentación convencional.
El AeroMobil Flying Car está propulsado por un motor de cuatro cilindros bóxer 2.0 turbo que gracias al sistema FADEC tiene funciones de conducción autónoma. Este motor ha sido adaptado para conseguir un significativo ahorro de peso y permite que el vehículo alcance los 160 kilómetros/hora en carretera y los 360 por aire a una altura máxima de 595 metros. El peso máximo autorizado es de 960 kilos con una capacidad máxima de carga de 240.
La fuerza del motor –desconocemos la cifra de potencia disponible– se transmite a la rueda delantera que además incorpora un diferencial electrónico y una transmisión adaptativa con diferentes tipos de uso según estemos circulando por carretera o volando. La transformación del vehículo de coche a avión se produce en sólo tres minutos.
La producción del primer vehículo de AeroMobil está limitada a 500 unidades a un precio de entre 1,2 y 1,5 millones de euros, en función de las especificaciones que requiera el cliente. Las primeras 25 unidades incluirán además un equipamiento especial, si bien AeroMobil tiene intención de fabricar un vehículo más asequible.
Periodista especializado en movilidad en todas sus variantes: coche, moto, bicicleta, patinete eléctrico... y no siempre por este orden, dado que la forma en la que nos desplazamos está cambiando. Más de 20 años de experiencia en el mundo del automóvil y en constante adaptación en un sector que no deja de generar noticias.