Ser aparcacoches en un resort de lujo en Miami (EE.UU.) debe de ser lo más parecido a tener el empleo soñado para cualquier amante del motor. Sin embargo, un mal día en el trabajo –de los que tiene cualquiera– puede salirte especialmente caro y eso fue exactamente lo que le sucedió al protagonista de esta historia.

Nuestro conductor aprovechó un momento en el que creyó pasar desapercibido para darle unos buenos acelerones al poderoso V12 del Lamborghini Aventador, pero no calculó la conocida furia que se gastan los escapes del supercar italiano. Éstos desprendieron un par de llamaradas e incendiaron la zaga del coche.

A gritos de "fuego, fuego" varias personas acudieron extintor en mano a apagar el incendio. Desde luego, sólo la rápida intervención de estos espontáneos evitó daños mayores en un superdeportivo que –recordemos– está valorado en más de 360.000 euros.

Por otro lado, en la defensa de nuestro protagonista cabe destacar que no es la primera vez que vemos un Lamborghini Aventador arder a causa de este trato abusivo en parado. Seguro que sus conductores de Londres o Dubai saben bien de lo que hablamos pero al menos ellos eran sus dueños, no los encargados de aparcarlo. Esperemos que la historia sirva de escarmiento al fanático empleado.

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Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.