La DGT cuenta ya con 70 radares capaces de fotografiar a los ocupantes de los vehículos de modo que a partir de ahora, estos dispositivos ya no controlarán sólo la velocidad de los coches, servirán para sancionar también otras infracciones como manejar el teléfono móvil al volante o no llevar puesto el cinturón de seguridad.
Estos nuevos radares, son de tipo láser y cuentan con una cámara capaz de captar hasta 50 imágenes por segundo, registrando así una prueba fiable de la infracción y permitiendo asociarla a un vehículo concreto, con su matrícula. El propietario será quien reciba la multa después, en su domicilio, pero gracias a la fotografía, en ella podrá identificar a la persona que ha cometido la infracción, como sucede ahora mismo con las denuncias por exceso de velocidad.
En Tráfico, aseguran que estos nuevos radares estarán operativos "en las próximas semanas" y se instalarán hasta en 70 ubicaciones diferentes por toda España. Cuentan con la ventaja extra de que no requieren una fuente alimentación externa, de modo que pueden quedar instalados en puntos remotos.
Con estos nuevos radares, la DGT quiere dar un impulso extra a la vigilancia en carreteras secundarias y en vías urbanas, donde el año pasado se registraron 1.126 y 254 fallecidos, respectivamente. En la mayoría de los casos, las distracciones fueron la causa principal de los accidentes y el uso del cinturón de seguridad –recuerdan en tráfico– reduce en un 50% el riesgo de muerte. Por comunidades, Andalucía será la más vigilada. Hasta 19 de estos nuevos radares se instalarán en el sur de nuestro país y se intensificará también la vigilancia del uso del cinturón por parte de los agentes.
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