Todo evento relacionado con el motor conlleva un inevitable factor de riesgo pero cuando éste consiste básicamente en quemar rueda al volante de dos Ford Mustang tuneados parece de cajón que hay que extremar las medidas de seguridad, ¿verdad?

Bueno pues parece que para algunos asistentes al denominado 'Motor Fest de Rio Bravo 2017', un show lúdico-festivo organizado al margen de las autoridades, no tenían la lección aprendida. Acudieron a semejante espectáculo en familia y no dudaban en hacer carantoñas con su pareja o coger en brazos a sus niños mientras dos Mustang preparados quemaban rueda a escasos centímetros. Como suena.

Sin una triste barrera, valla o cinta que delimitara un perímetro de seguridad, los dos deportivos americanos derrapaban en círculo realizando una especie de 'danza hipnótica del drifting' cuyos resultados podemos considerar ya como probados. Sólo así se explica que pese a que la tragedia se mascaba en todo momento, ningún asistente pareciera estar ni mínimamente preocupado.

Al final pasó lo inevitable y un conductor perdió el control de su muscle car y arrolló a parte del público. Las autoridades confirmaron después que seis heridos habían requerido atención médica aunque la más grave fue una mujer de 43 años que presentó fracturas en ambas piernas. Para colmo, el conductor no dudó en darse a la fuga.

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Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.