El estudio, realizado por la Fundación Mapfre tras la distribución de cuestionarios en centros escolares para padres, alumnos y profesores, analiza el nivel de conocimientos y la implicación de los colegios y las familias en educación vial. La conclusión es que los profesores tienen por lo general una actitud positiva hacia la seguridad y la educación vial, aunque se consideran poco formados para impartir esta materia, que además para más de la mitad resulta innecesaria. Los docentes reconocen que a pesar de la buena disposición de los alumnos a la hora de aprender educación vial, sólo tres de cada diez tiene los conocimientos adecuados.

El informe 'Educación en Valores para la Seguridad Vial' señala que la mayoría de los alumnos de Educación Primaria y la ESO cumplen las normas básicas de convivencia social, pero no son conscientes de las consecuencias que implica comportarse de manera poco segura como peatones y conductores de bicicleta y ciclomotor. El estudio destaca que la mayoría de los encuestados no cruzan habitualmente por los pasos de cebra, ni esperan a que el semáforo esté verde. También muestra que muchos de los menores desconocen las señales, tanto las verticales (el 57 por ciento) como las que proceden de los agentes (60 por ciento).

Desde la Fundación Mapfre se apela a la necesidad de que los padres prediquen con el ejemplo

Respecto a las respuestas de las familias, la fundación expone la necesidad de que mejoren también en conocimientos y buenas prácticas y considera preocupantes algunas de las informaciones que aportan los menores sobre la conducta de sus padres, como que al 75 por ciento a veces se les olvida abrocharse el cinturón de seguridad. El mismo porcentaje de padres no vería como un peligro conducir con exceso de velocidad, manipular el GPS y hablar por el teléfono móvil mientras se conduce. El estudio también alerta de que casi la mitad de los padres no conocen ciertas normas básicas relacionadas con el adelantamiento a ciclistas, la velocidad a la que se debe circular por una zona residencial, las obligaciones que tienen los peatones o cómo actuar en caso de atropello, entre otras.

Según el director general del Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre, Julio Laria, si mejorara la colaboración entre familias y colegios a la hora de realizar actividades relacionadas con la seguridad y la educación vial (un 78 por ciento de los profesores reconoce que no realiza actividades conjuntamente) el nivel de conocimientos de los alumnos mejoraría sustancialmente. Recuerda a los padres que "tienen que predicar con el ejemplo cada día con comportamientos responsables", porque son modelos para sus hijos.