La presentación del videojuego Gran Turismo 6 ha propiciado que salga a la luz uno de los coches más esperados del momento porque, a pesar de tratarse de un automóvil de ficción, hay quien asegura que anticipa algunos rasgos que estarán presentes en los Fórmula 1 del futuro.
Al menos, lo que es incuestionable es que este Red Bull X2014 ha surgido directamente del lápiz de Adrian Newey, director técnico de la escudería tetracampeona y padre de los RB6, RB7, RB8 y RB9, es decir, de los últimos monoplazas que han dominado la competición. Además, esta es la segunda vez que el británico colabora con Poliphony Digital para crear un bólido único que, a buen seguro, volverá a ser el más rápido del videojuego.
De momento, Sony sólo nos ha dejado ver estas dos imágenes en las que apreciamos un monoplaza carrozado con cockpit cubierto y unos faros delanteros y pilotos traseros que le permitirán disputar pruebas nocturnas, aunque sea en la ficción. También sabemos que existirán tres versiones de este modelo denominadas: X2014 J (Junior), X2014 S (Standard) y X2014 F (Fan car).
Próximamente conoceremos más detalles técnicos de este bólido pero como referencia sirvan los del anterior Red Bull X1 Prototype, que contaba con un motor de 1.483 caballos a 15.000 r.p.m y pesaba tan sólo 545 kilogramos. A sus mandos, el propio Sebastian Vettel logró un tiempo en Suzuka de 1:11.540, 18 segundos más rápido que la pole lograda por Fernando Alonso en 2006 (1:29.599).
Además del Red Bull X2014, en el Gran Turismo 6 los jugadores encontrarán otro deportivo de calle inédito como el Mercedes AMG Vision, ¡qué pinta tienen ambos!
Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.