Este sistema es muy útil para moderar la velocidad de circulación en las calles urbanas, de modo que el coche privado pueda ser compatible con otras alternativas como el desplazamiento a pie y en bicicleta.
Los badenes convencionales tienen firmes opositores ya que su instalación penaliza a todos los conductores –vayan rápido o no–, incluso a los vecinos, a causa del ruido que producen coches y camiones al pasar por el. También en muchas ocasiones provocan averías en elementos del vehículo como spoilers, trapecios, amortiguadores, escapes, etc... Otro inconveniente surge por parte de los servicios de emergencias, principalmente de bomberos y ambulancias, la que está siendo la principal barrera a la instalación de badenes.
Por todo ello las ventajas de Vivaden son claras ya que es aplicable a todos los tipos de vehículos que circulan por entornos urbanos, tanto pesados como ligeros, tiene forma y dimensiones similares a un badén convencional y en posición normal, el badén debe de estar escondido y no interferir con el tráfico. Para elo cuenta con un sistema de control remoto de las posiciones con dos posiciones, normal y activo. Esto es muy útil por ejemplo para su colocación en zonas escolares donde se puede utilizar en un horario concreto.
Además el Vivadén es un dispositivo móvil, no es un obstáculo fijo.Se oculta en la calzada según las necesidades del tráfico y permite el paso libre de los vehículos de emergencias, no genera por ello atascos innecesarios, porque se adapta a las circunstancias del tráfico en cada momento y no penaliza a todos los conductores por igual, por eso permite circular sin frenazos o interrupciones
El primer Vivaden se encuentra en Asturias y ya está operativo.
