Por fin llega al Ibiza la tecnología ACT de desconexión activa de cilindros, un sistema que nos permite lograr una reducción de consumo entre 0,4 litros y 1 litro a los 100 kilómetros en función de las condiciones de conducción respecto a un motor gasolina de equivalente potencia.

Para ello recurre a un inteligente sistema electro-mecánico ya implementado en otros modelos del grupo VW-Audi, como el VW Polo o el Golf, en concreto, y mediante la centralíta electrónica, el motor de cuatro cilindros apaga dos de ellos –el segundo y el tercero– cuando las condiciones de caraga así lo hacen posible. Esto se produce al rodar entre 1.500 y 4.000 vueltas y con un esfuerzo de par entre 25 y 100NM de los 250 que es capaz de generar este propulsor. Presisamente el bloque tomado como base es el gasolina 1.4 TSi, que arroja una potencia de 140 caballos con un consumo medio de 4,7 litros a los 100 kilómetros. La aceleración es de 7,8 segundos en el 0-100 kilómetros/hora con una velocidad punta de 210.

El conjunto se completa con un concienzudo trabajo de aligeramiento sobre el propulsor, lo que le permite pesar 22 kilos menos que su equivalente sin sistema ACT, pese a que el mecanismo pesa tres kilogramos.Para desconectar los cilindros, se les libera de explosión y se les abre completamente tanto la válvula de admisión como la de escape, algo que como ya hemos dicho decide la centralita electrónica, teniendo en cuenta además de la citada carga del motor a través del régimen de giro y el par, las condiciones de rodadura; pues no es lo mismo si nos encontramos sobre un puerto de montaña o en una autopista despejada.

Por el momento sólo está disponible con el acabado deportivo FR, si bien

es posible combinarlo con todas las carrocerías disponibles en el modelos;

tres –SC– y cinco puertas o familiar –ST–

Al volante este proceso resulta absolutamente imperceptible; durante nuestra toma de contacto intentamos detectar el momento en que se desconectan los cilindros, resultando absolutamente imposible. Ademas, a diferencia de los citados Golf y Polo, el Ibiza no cuenta con testigo en el salpicadero que nos indique que estamos circulando en dos cilindros, a nuestro parecer sería recomendable introducirlo para que el conductor se haga cómplice de la situación e intente gastar lo menos posible.

El equipamiento es muy completo, contando con control de estabilidad ESC, autoblocante electrónico, , radio MP3 con mandos en el volante, doble salida escape, cuatro elevalunas eléctricos, llantas de 16 pulgadas, volante específico, faros diurnos y traseros de LED…

Además, por 1.000 euros más –ahora por una campaña en concreto su precio real no supera los 150 euros– está disponible el kit iTech compuesto por llantas de 17 pulgadas, navegador Seat potable system, faros bixenón con LED e iluminación específica interior.

El precio de partida inicial para la carrocería SC es de 19.720 euros, pero aplicando los descuentos vigentes, el PIVE y la financiación con la propia marca, se queda en 14.920 euros.