De Volkswagen Passat CC pasa a llamarse directamente Volkswagen CC, con el fin de consolidarse en el mercado como una opción lujosa y de estilizada carrocería cupé frente a las berlinas medias más convencionales.
El Volkswagen CC incorpora de serie elementos como los faros bi-xenón, luces de ayuda en curva, detector de fatiga y reposacabezas de seguridad con ajuste longitudinal. Opcionalmente puede disponer de un sistema que combina el asistente de cambio involuntario de carril con el avisador de vehículo en el ángulo muerto, que interviene sobre el volante para evitar una colisión en caso necesario. También ofrece dispositivos ya vistos en otros modelos, como el asistente de luces que cambia automáticamente de largas a cortas o el reconocimiento de señales de tráfico mediante cámara. La comodidad se puede incrementar con asientos climatizados y función de masaje –únicamente para el conductor– y un mecanismo denominado Easy Open que permite abrir automáticamente el maletero con solo mover el pie detrás del coche gracias a un sensor integrado en el parachoques que registra las señales de movimiento. Para ello, el conductor debe disponer de la llave de control remoto correspondiente.
Diferentes opciones
La gama de motores del Volkswagen CC no incorpora cambios de importancia. Lo más destacado es la aparición de una variante ecológica de bajo consumo y emisiones. Es el denominado 2.0 BlueTDI de 140 caballos que cumple la norma de emisiones Euro 6 que entrará en vigor en otoño de 2014. Tiene un consumo homologado de sólo 4,9 litros por cada 100 kilómetros y unas emisiones de CO2 de 127 gramos por kilómetro. Está disponible con cambio manual o automático DSG y sistema de recuperación de energía en las frenadas y parada y arranque automática del motor Stop&Start. Junto a esta versión, el motor diesel 2.0 TDI ofrece otro escalón de potencia, 170 caballos.
En la gama de gasolina se mantiene el 1.8 TSI de 160 caballos, el 2.0 TSI de 210 cv y el V6 atmosférico de 3.6 litros y 300 caballos. Los motores de gasolina no tendrán sistema de parada y arranque automático, pero todos, incluidos los diesel, se beneficiarán de un sistema de recuperación de energía en las frenadas.
Todos los propulsores se pueden combinar con el cambio automático de doble embrague DSG, que según versiones monta la variante de seis o siete velocidades. Asimismo, el Volkswagen CC V6 equipa de serie el sistema de tracción total permanente 4Motion. También algunas versiones montan un sistema de suspensión adaptativa DCC y el Diferencial Electrónico de Deslizamiento Limitado XDS, disponible por primera vez en el CC. Con este dispositivo se mejora la tracción en las curvas más pronunciadas.
Al volante del nuevo CC comprobamos las virtudes de un modelo muy equilibrado. A pesar de la carrocería estilo cupé la habitabilidad es buena, con una altura disponible incluso en las plazas traseras suficiente para tallas medias. Las plazas delanteras lógicamente son más espaciosas y la posición al volante es muy cómoda, aunque la banqueta del asiento está situada en una posición bastante baja, lo que puede dificultar la entrada y salida al vehículo para algunos conductores. Los asientos ofrecen una buena sujeción e incorporan como novedad unos rediseñados reposacabezas que permiten regular su proximidad con la cabeza, aumentando así la comodidad y seguridad.
En carretera se aprecia el trabajo llevado a cabo en diferentes lugares de la carrocería –por ejemplo en los pasos de rueda– con el fin de mejorar la insonorización. Si optamos por la suspensión regulable adaptativa podemos disfrutar más de la conducción gracias a una posición Sport ciertamente deportiva, para aquellos conductores que buscan las máximas prestaciones del vehículo.
