El Yeti más accesible es el 1.2 TSI Active de dos ruedas motrices con un precio de 20.200 euros, y el más caro es el 2.0 TDI DSG 4x4 Elegance, que se ofrece en los concesionarios por 32.960 euros. Entre ambas versiones, la gama reúne un amplio abanico de mecánicas y equipamientos.
Su filosofía, afin al planteamiento SUV de coche para todo con grandes posibilidades para el ocio, cubre este tipo de vehículo en el segmento de los compactos, determinado por sus medidas, con 4,20 metros de largo. Su peculiar diseño de carrocería le dotan de un interior cómodo, amplio y modificable según las necesidades de carga que tengamos.
El sistema Varioflex permite modular rápidamente los asientos posteriores, ganando espacio en el volumen del maletero. Éste puede contener desde 405 hasta 1.760 litros de volumen de carga, cifras por encima de la habituales en un coche de su tamaños. El gran portón posterior facilita el acceso y la manipulación de los objetos que transportemos.
Con tres posibles motores de gasolina y otros tres Diesel, las potencias van desde los 105 hasta los 170 caballos. Además de las cajas de cambio manuales, las versiones superiores pueden equipar el cambio automático de doble embrague DSG. Con dos o cuatro ruedas motrices y una altura libre al suelo de 180 milímetros, el Yeti no tiene miedo en abandonar el asfalto y circular por pistas de tierra.
Además de los tres acabados disponibles (Active, Ambition y Elegance) Skoda ofrece paquetes de personalización, como el Alu Decorative de terminación en aluminio y elementos exteriores de protección para fuera carretera. También podemos enriquecer el equipo con con una amplia lista de opciones como un espectacular techo solar panorámico. Y, para quien esté más comprometido con el medio ambiente, la versión GreenLine plantea 4,6 litros de consumo medio, emisiones de 119 g/km, sistema start/stop y de recuperadión de energía en la frenada.
