El SsangYong Rexton acaba de sufrir un cuidado rediseño que lo mantiene vivo respecto a la competencia más directa formada, entre otros, por Hyundai Santa Fe, Kia Sorento y Mitsubishi Outlander. Frente a estos todoterreno, el Rexton tiene una imagen más clásica y destaca por su terminación, un elevado equipamiento y siete plazas de serie, con las dos auxiliares que se colocan en el maletero aptas para los niños.

Más allá de estos puntos generales, el aspecto del 'gran' SsangYong resulta más atractivo que su antecesor debido a las nuevas llantas de 18 pulgadas, a los faros y pilotos con led, a los espejos retrovisores modificados, al capó en forma de W–de ahí que comercialmente se conozca a este Rexton con esta consonante– y un portón con una luneta distinta.

Se puede escoger la versión 4x2 con cambio manual o automático al igual que ocurre con el 4x4

Ya en marcha, el Rexton es un vehículo muy confortable, con unas suspensiones muy suaves. En ciudad y carreteras sin muchas curvas, el Rexton mantiene la dinámica sin problemas hasta que aparecen las curvas, en las que el exceso de peso –dos toneladas de masa con un sólo ocupante– muestra un carácter más torpón.

Bajo el capó motor, el nuevo turbodiésel 2.0 litros de 155 caballos –que sustituye al 2.7 litros de 160 caballos– muestra mayor finura, con una rumorosidad significativamente menor. El cambio manual de seis relaciones, de recorridos largos, permite una constante progresión. Los consumos, a su vez, se han reducido 1,3 litros a los 100 sin olvidar las emisiones, que también lo hacen, lo que permite al Rexton bajar el tramo del impuesto de matriculación del 14,75% al 9,75%.

Ya a la venta, el Rexton 2013 tiene una interesante campaña de lanzamiento de 3.000 euros, por lo que deja a la versión de acceso Premium Plus 4x2 –climatizador, airbags laterales, ESP, control de descenso, volante multifunción, radio CD con seis altavoces, Bluetooth, navegador TomTom, faros antiniebla, llantas de 16 pulgadas, cristales tintados y tapicería en piel– por 25.500 euros. El Limited incorpora navegador táctil con cámara de visión trasera y llantas de 18 pulgadas mientras que el Limited Auto añade techo solar, asientos con cuero deluxe y volante y pomo con inserciones de madera. La pintura metalizada, único opcional disponible para todos los acabados, cuesta 425 euros.

SsangYong Rexton