Es un coche mítico, deseado por muchos aficionados, y ahora, una auténtica pieza de colección. Muchos han pedido su resurrección y tras varios intentos, por fin los accionistas de la DeLorean Motor Company han decidido que se vuelva a fabricar el DMC-12 aunque con una ligera revisión mecánica: tras un acuerdo firmado con la empresa Epic Electric Vehicles, el ‘nuevo’ DMC-12 cambiará su motor de gasolina por uno eléctrico. Por el momento, el prototipo presentado incorpora un propulsor eléctrico que desarrolla 260 caballos (las fotos que acompañan este artículo corresponde a ésta) que ya está circulando por las carreteras para comprobar su eficacia, su carga y su fiabilidad. A lo largo de 2012 está previsto fabricar más prototipos para hacer kilómetros y solucionar posibles fallos mecánicos, mientras que 2013 es el año marcado en el calendario para relanzar el coche de “Regreso al futuro”, en principio, sólo en Estados Unidos. Además, el DMC-12 verá rediseñado su habitáculo para ofrecer un interior más lujoso y adaptado a las nuevas tecnologías, con una conexión específica y un soporte ideado sólo para iPhone (GPS al margen).
John Zachary DeLorean nace en 1925 en Chicago, hijo de inmigrantes rumanos. Da sus primeros pasos como ingeniero en General Motors, donde llega a encabezar el puesto de vicepresidente en 1973. Harto de la rutina diaria y del éxito continuado, da el salto hasta Irlanda del Norte, donde afinca su empresa automovilística DeLorean Motor Cars Company. En 1981, una carrocería diseñada por Giugiaro, chasis Lotus y mecánica Renault-Peugeot Volvo (un V6 de 2.8 litros y 130 caballos) irrumpe un 21 de enero en el mercado bajo el apelativo DMC-12. En apenas dos años, la compañía quiebra tras haber vendido 9.000 vehículos a una media de 25.000 dólares por unidad. Este mismo 2011, en enero, se conmemoró su 30 aniversario.
