Aunque está basado en la última generación del C4 (ver reportaje), su imagen es muy distinta y tiene mucho más empaque, con unas proporciones curiosas si los ponemos uno al lado del otro. Es cinco centímetros más corto y con una caída del techo en la parte posterior mucho más acusada, para darle un cierto estilo de cupé, pero al mismo tiempo es más alto que el C4 y está más “alejado” del suelo, para conseguir una postura de conducción algo más elevada y un acceso más fácil a su interior. Con la intención de conseguir esa pretendida imagen de cupé las puertas traseras están disimuladas, con el tirador en un extremo de la gran ventanilla posterior. Precisamente las puertas posteriores tienen mucho que ver en uno de los principales inconvenientes del DS4, son pequeñas, con lo que el acceso resulta complicado, la ventanilla forma un pico muy prominente que puede resultar incómodo y los cristales son fijos, pues no descienden y ni siquiera son abatibles.
Poco agradable detrás
En el interior encontramos el mismo salpicadero del C4 pero con algunas aplicaciones (metales y acolchados con el logo DS) que lo hacen diferente. Esto no es una desventaja, pues el salpicadero del C4 tiene un logrado diseño y la sensación de calidad es excelente, además en el DS4 puede ir completamente recubierto en cuero de color tabaco que lo hace todavía más vistoso.
El espacio interior en las plazas delanteras es más que suficiente, pero detrás resulta algo agobiante, tanto porque es más pequeño que un C4 como porque las ventanillas dejan poca superficie acristalada, además de ser fijas. El maletero, con 370 litros también es algo más pequeño que en el C4, pero es una buena capacidad, en la media de su segmento. Todos los
DS4 llevan de serie lo que Citroën denomina parabrisas panorámico, que se prolonga por encima de la cabeza de los ocupantes de las dos plazas delanteras, un elemento más vistoso que práctico, ya que en España en un día de sol llega a resultar molesto.
A pesar de tener una mayor altura tanto de carrocería como en distancia al suelo esto no repercute en el comportamiento, ya que Citroën ha realizado muchos cambios en las suspensiones, con unos reglajes más firmes y una menor asistencia y desmultiplicación de la dirección que no resulta tan blanda como en la mayoría de los modelos de la marca, para que el DS4 tenga un tacto más deportivo y un poco más de agilidad. Puede llevar llantas desde 16 a 19 pulgadas, en función del motor y las opciones.
Precios desde 20.000 euros
Los motores disponibles son seis, tres gasolina basados en el bloque de 1.6 litros con potencias de 120, 150 y 200 caballos (los dos más potentes con turbo), y tres Diesel con potencias de 90, 110 y 163 caballos, con cajas de cambios manuales de cinco o seis velocidades (los más pequeños en gasolina y Diesel son de cinco), mientras que el 150 caballos lleva cambio automático robotizado de serie. El motor Diesel de 110 se denomina e-HDI y está disponible tanto con cambio manual como con cambio automático robotizado y sistema de parada y arranque automáticos. El nuevo DS4 está disponible en tres niveles de acabado y los precios van desde los 20.290 euros del motor gasolina de 120 caballos hasta los 28.290 del gasolina 200 caballos.
Esta es la lista oficial de precios y versiones del Citroën DS4 en España:
Citroën DS4 VTi 120 Design 20.290 €
Citroën DS4 VTi 120 Style 22.590 €
Citroën DS4 THP 155 CMP6 Style 24.990 €
Citroën DS4 THP 200 Sport 28.290 €
Citroën DS4 HDi 90 Design 21.090 €
Citroën DS4 e-Hdi 110 Airdream 6v Design 22.390 €
Citroën DS4 e-Hdi 110 Airdream CMP6 Design 23.190 €
Citroën DS4 e-Hdi 110 Airdream 6v Style 24.690 €
Citroën DS4 e-Hdi 110 Airdream CMP6 Style 25.290 €
Citroën DS4 HDi 160 6v Style 26.490 €
Citroën DS4 HDi 160 6v Sport 27.990 €
