Su presentación ha tenido lugar en el pasado Salón del Automóvil de la República Checa, donde al jugar en casa, Skoda ha levantado gran expectación. No ha sido ni con un modelo nuevo ni un prototipo, sino con un acabado de lujo para el Skoda Superb Combi denominado Laurin&Klemet. El tope de acabado del que disfrutará la berlina en muy poco tiempo se caracteriza por una calidad de terminación exquisita, como se puede apreciar en la foto del salpicadero, todo tapizado en piel y en el que las molduras metálicas y terminadas en madera también tienen protagonismo. En el exterior, las llantas multirradio, los cromados y las nuevas tonalidades para bañar a la carrocería serán las protagonistas.

Motor vehicle, Steering part, Steering wheel, Center console, Vehicle door, Car seat, Vehicle audio, Personal luxury car, Luxury vehicle, Gear shift, pinterest

Y ahí no acaba la cosa, puesto que el Superb Combi Laurin&Klemet tendrá un amplio catálogo de propuestas que justifiquen su precio, que partirá, en el mejor de los casos, de los 30.000 euros: climatizador, asientos eléctricos calefactados, navegador, luz diurna, faros bixenón con alumbrado en curva, sensores de parking e, incluso, hasta sistema de aparcamiento automático.

Toda esta exclusividad irá pareja a la motorización con la que se podrá equipar, de ahí que Skoda haya decidido que los propulsores más potentes sean los únicos que puedan asociarse al acabado Laurin&Klemet: en gasolina, los 2.0 TSI de 200 caballos y 3.6 V6 de 260 caballos, y en Diesel, el 2.0 TDI de 170 caballos (los cambios automáticos de doble embrague DSG serán opcionales).