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La fabricación de un automóvil no es precisamente sencilla, pero la experiencia que acumulan algunas marcas hace que parezca sencillo. No obstante, hay otras empresas que no lo han tenido tan fácil, como le ocurrió a Tesla con el Model 3 (a pesar de fabricar anteriormente los Model S y X) y ahora lo está viviendo Rivian. La empresa norteamericana, respaldada por Amazon, ha tenido varios problemas en la producción de sus coches eléctricos, pero ahora parece haberlos solventado y ha aumentado el ritmo de producción.
Es algo normal que un fabricante tan joven tenga problemas de producción, sin embargo, también hay que sumar otros factores que han ralentizado el progreso de Rivian molestando a muchos inversores. Sin embargo, ahora, con el anuncio del aumento de su producción las cosas cambian y las acciones de la empresa suben un 10,5%, hasta los 66,04 dólares.
Retrasos importantes más allá del Covid-19
A comienzos de enero Rivian tuvo que detener la producción durante una semana en la planta de Normal, Illinois, para corregir y mejorar algunos procesos de montaje, según informaron en su momento fuentes de la marca que pidieron no ser identificadas al ser una información privada. A esto debemos sumar algunos brotes de COVID-19 y los cuellos de botella en la cadena de suministro.
Después de comenzar la producción del Rivian R1T en el mes de agosto, los responsables prometieron una cadencia de 50 coches por semana hasta finales de diciembre, una cuota que no se llegó a alcanzar, teniendo algunas fluctuaciones. Ahora han alcanzado las 200 unidades a la semana, que sigue sin ser un buen dato, pero al menos significa una mejora notable respecto al mes de diciembre de 2021.
El objetivo es alcanzar las 200.000 unidades al año
La producción del Rivian R1T también se vio ralentizada por el inicio de la fabricación del Rivian R1S, el segundo modelo de la compañía (un SUV eléctrico), que se monta en la misma línea del pick-up. Fuentes de la compañía dicen que se han fabricado algunas unidades vendibles, pero todavía faltan cosas por pulir en preproducción. Además, también están trabajando en una furgoneta de reparto eléctrica para Amazon, de la que se tiene previsto entregar 10.000 unidades a finales de 2022 y 100.000 para completar el pedido a finales de la década.
El objetivo final de Rivian, según sus propios planes, es poder fabricar alrededor de 200.000 unidades al año, es decir, más de 3.800 coches por semana. Para ayudar a alcanzar esa cifra, Rivian tiene previsto construir más instalaciones en Georgia, algo que supuestamente le dará la capacidad de fabricar 400.000 unidades al año.
