Para muchos era algo que tenía que ocurrir tarde o temprano si se querían hacer las cosas con sentido y coherencia, un encuentro necesario entre ambas partes que consiguiera establecer unos objetivos comunes y una línea de actuación bien definida de cara a los años venideros, pues bien así ha sido.
Nos referimos a la reunión que tuvo lugar en la jornada de ayer entre el Gobierno y el sector de la automoción española. Un encuentro que ha servido para poner en marcha un plan estratégico que fomente una movilidad sostenible y eficiente, al mismo tiempo que se peleará por lograr una adaptación de la industria a los nuevos retos que se presentan.
De esta forma, el Ejecutivo y el sector automovilístico constituirán a finales de este mes un consejo estratégico y un grupo de trabajo, constituido por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el Ministerio para la Transición Ecológica, las asociaciones de fabricantes (Anfac), concesionarios (Faconauto), vendedores (Ganvam), proveedores (Sernauto) e importadores (Aniacam), y los sindicatos CC.OO. y UGT, tal y como informan desde Europa Press.
Uno de los puntos clave de la reunión, presidida por el secretario general de Industria y Pyme, Raúl Blanco, ha sido el consenso alcanzado por ambas partes por el que se pretende trabajar sobre una nueva fiscalidad ‘verde’ que favorezca la reducción de emisiones contaminantes. El punto de partida será la puesta en marcha de una mesa por la movilidad sostenible, cuyo objetivo sea coordinar medidas a medio y largo plazo que favorezcan un nuevo modelo de movilidad compatible con el compromiso del Gobierno con la transición ecológica.
Por otro lado, también se han tratado temas relacionados con las inversiones, como la productividad, coste de mano de obra, coste logístico y coste energético. El principal objetivo de todo ello es el de atraer nuevos modelos más sostenibles a las factorías españolas.
Por último, cabe mencionar un tema que preocupa tanto al Ejecutivo como al sector español de la automoción, siendo este el de las emisiones de dióxido de carbono (CO2). A finales de año se fijarán unos límites desde Europa para automóviles y vehículos comerciales, por lo que ambas partes deberán definir un objeto de reducción de este gas de entre el 15 y el 20% para el año 2025 y de entre el 30 y el 40% para 2030, respecto a los niveles que se registren en 2021.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
