Si dentro del sector de los SUV tenemos que identificar al más llamativo y singular de todos, probablemente, nuestro candidato sea uno que procede desde California, está propulsado por electricidad, tienes puertas de ala de gaviota y responde al nombre de Tesla Model X.
Desde su llegada al mercado no ha gozado de ser un modelo muy popular entre los preparadores más reputados del sector y quizás eso empiece a cambiar tras ver lo que ha realizado T Sportline en el SUV eléctrico de Tesla. Parece que la principal consigna de este especialista era llamar aún más la atención del público y es por ello que ha optado por darle una imagen de lo más extravagante, tanto por fuera como por dentro.
Limitado a tan solo 20 unidades, el kit de carrocería denominado T Largo es el encargado de hacer del Model X un ejemplar con un aspecto mucho más agresivo y que está compuesto por una serie de elementos de nueva factura fabricados en fibra de carbono, tales como paragolpes delantero y trasero, faldones laterales, difusor y alerón posterior, así como unos pasos de rueda que añaden cinco centímetros al ancho total del coche. Todo ello bajo una pintura de color negro de lo más siniestro posible.
Las modificaciones en la parte externa se completan con unos cristales tintados y unas llantas de aleación de nueva factura, de 22 pulgadas de diámetro y asociadas a unos neumáticos Pirelli Scorpion Zero. Como era de esperar, el interior también ha recibido los pertinentes cambios para ser aún más llamativo y exclusivo, ofreciendo un habitáculo en el que el gran protagonista es el cuero de color naranja con inserciones en fibra de carbono.
Por último, en la parte mecánica no encontramos ningún tipo de modificación y el P100D utilizado para este proyecto sigue contando con su sistema de propulsión eléctrico de más de 600 caballos y un par máximo de 967 Nm. Unas cifras que son suficientes para batir a rivales como los Lamborghini Urus, Range Rover Sport SVR o Mercedes-AMG G 63, tal y como vimos en esta drag race.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta