Al igual que su padre, el Rey Emérito Don Juan Carlos I, al Rey Felipe VI le gustan los coches y le agrada conducir. Un placer que, dicho sea de paso, tiene sus raíces en Alfonso XIII, el primer monarca español que se interesó por la velocidad en sus múltiples facetas, en un pasado que guarda una estrecha relación con Hispano Suiza, la marca patria que llegó a ser un referente de lujo y deportividad en la Europa de los felices años veinte y los posteriores años treinta.

Ahora, con motivo de la última edición del Mobile World Congress celebrada en Barcelona, la renacida Hispano Suiza ha querido estar presente con un stand cuyo centro de atención es, sin duda, un potente simulador que ofrece, en clave virtual, la experiencia de conducir el hipercoche eléctrico Carmen Boulogne. Una experiencia que, tras el protocolario acto de inauguración de la feria, el Rey Felipe VI no quiso perderse.

Una experiencia con un toque nostálgico

Sentados en el simulador de Hispano Suiza, con los ojos fijos en la pantalla frente al asiento o utilizando, si se desea, las gafas de realidad virtual, es posible dar una vuelta con el Carmen Boulogne por una recreación del histórico circuito de Montjuïc, el legendario trazado urbano, hoy desaparecido, que acogió entre 1969 y 1975 varios de los primeros Grandes Premios de Fórmula 1 disputados en España y que llegó a ser considerado como el equivalente nacional del GP de Mónaco.

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Hispano Suiza

Un circuito virtual pero con mucha solera donde los 1.114 CV al eje trasero del Carmen Boulogne, en según qué momentos, convierten el paseo en un desafío para las manos y los pies, tal y como pudo comprobar el Rey Felipe VI junto al resto de autoridades y organizadores del MWC.