La DGT se dispone a enviar unas 13 millones de cartas informativas–en diferentes fases– destinadas a los propietarios de vehículos con más de diez años de antigüedad. Los titulares de estos vehículos recibirán los datos técnicos del mismo, su fecha de primera matriculación, los datos del conductor habitual, la situación de su Inspección Técnica, el número de bastidor, la potencia, el kilometraje o sus emisiones de CO2. Además, se informará de la situación administrativa que consta en dicho Registro de Vehículos de la DGT, como el seguro, impuesto de circulación, embargos o precinto.
El objetivo de esta campaña informativa no es otro que "mejorar de la seguridad vial y la reducción de sus principales factores de riesgo", según recuerda Tráfico. Alrededor de la mitad del parque automovilístico español tiene más de diez años, por lo que no cuenta con las mejoras técnicas de seguridad activa y pasiva que ya traen incorporados los modelos más nuevos.
Según un reciente estudio de la DGT, en los accidentes ocurridos en carreteras convencionales el riesgo de que haya al menos un fallecido se duplica en los vehículos antiguos respecto a los más modernos y con mayor equipamiento de seguridad activa y pasiva. Tráfico subraya que si el receptor de la carta observa que los datos que se le remiten no son correctos o necesita alguna aclaración sobre los mismos, puede dirigirse a cualquiera de las Jefaturas Provinciales de Tráfico. Y si el titular de vehículo considera necesario ampliar la información que recibe, puede solicitar un informe completo del coche en cualquier Jefatura de Tráfico o a través de la sede electrónica de la DGT.
La DGT aprovecha la carta para recordar la importancia de realizar un adecuado mantenimiento del vehículo, circular con los neumáticos en buen estado y con las luces de cruce encendidas durante todo el día. También se recuerda que si el ciudadano está pensando comprar un vehículo de segunda mano y quiere conocer la situación en la que se encuentra el mismo, puede solicitar previamente a la compra un informe de dicho vehículo en cualquier Jefatura de Tráfico o en la sede electrónica.
Esta medida es la primera que pone en marcha Tráfico para promover la renovación del parque automovilístico español pero no será la único. Tal y como os adelantamos aquí, los radares podrán multar automáticamente a los coches que pillen superando el límite de velocidad permitida si no tienen la ITV en regla y en último término, la DGT estudia incluso la "retirada efectiva" de los vehículos plenamente constatados como no seguros.
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