Todo comenzó cuando en la entrega del premio “Ángel Amarillo” al mejor coche del año fue para el Volkswagen Golf que supuestamente había recibido algo más de 34.000 votos, cuando en realidad obtuvo solo 3.400. Este incremento sustancial de votos fue denunciado por la publicación alemana “Sueddeutsche Zeitung” que acusó directamente al conocido club alemán del automóvil como autor de esta manipulación.

Hay que señalar que el denominado Allgemeine Deutsche Automobilclub –ADAC– está formado por 19 millones de asociados lo que le sitúa como el segundo club automovilista más importante del mundo. Cuenta además con un gran prestigio como asesor dentro de la industria alemana y ofrece multitud de servicio al automovilista. Aunque en un primer momento el ADAC negó estas informaciones, finalmente ante la evidencia de los datos el propio director general del Club, Karl Obermeler, se ha visto obligado a admitir los hechos y anunciar una investigación.